exiges demasiado sin ofrecer mucho de tu parte,
pides confianza y tu desconfías,
pides paciencia y eres impaciente
cuando no hay ninguna razón,
pides que sean todo lo que tu no quieres ser,
me atemoriza no poder cumplir o llenar tus expectativas,
porque el amor no es una condición
no acata reglas de sumisión, ofrecer todo,
entregarse plenamente sin esperar lo mismo de la otra parte,
el amor debe ser cual ave libre que remonta los cielos
esperando que alguien poco sensato haga presa de el,
porque el amor es así, loco y aventurado,
pero al sentirse preso, sofocado, por el estrecho espacio
que le ofrecen de sentir plenamente esa emoción,
desea ser libre de nuevo esperando mejor oportunidad
de crecer y estabilizar una que pudiera ser hermosa relación..
Suelta las amarras y viaja en tu barca llena de ilusiones,
a donde la corriente y la brisa del mar de la esperanza te guíe,
te lleve al encuentro del amor, único indisoluble,
el que perdurara por siempre sin importar lo que suceda,
sin mirar la tormenta que se avecina,
solo mira que delante de la obscuridad te espera el sol.
Porque cuando hay amor puro y verdadero
no se huye de el cuando surge la menor situación,
se enfrenta y se lucha contra el mundo entero si es necesario,
porque cuando hay amor no existe el orgullo que lo separe del ser amado,
porque el amar es cerrar tus sentidos a todo lo negativo y creer solo con el alma,
porque el amar es la planta que se debe cuidar
con rayitos de caricias y palabras de ternura,
porque el amar es un fuego interno que va creciendo como una hoguera,
por que el amar es ofrecer libertad de sentir,
pensar y expresar lo que sientes en ese momento,
sin inhibiciones y temores, sin prejuicios
y reglas adoptadas por no creer en si mismo.
Siente el calor que inunda tu corazón
y déjate llevar por las emociones que te embargan,
las dudas que tienes por el futuro de esta relación,
se irán con la niebla del pasado y ahí se quedara,
no vivas de el por experiencias anteriores,
no las asocies con el presente,
pues solo lograra ser dueño de un corazón atormentado,
que no lo deja ser feliz y cuando la luz calida de una nueva ilusión
pose en tu corazón, abre tus puertas y recibe con plenitud lo que se te ofrece.
Pero entrega todo. Entregate a ti mismo.
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